«No importa que se vaya de madre porque, si estás jugando, para ti es juego»
Esther García Llovet, escritora internacionalmente reconocida y autora de la portada número 3, nos da su primera entrevista como fotógrafa
¿Eres fotógrafa?
Sí.
¿Por qué?
Porque me robaron el móvil hace dos años en la calle en Plaza de España y me compré un móvil que tenía una cámara. Yo hasta hace dos años nos había hecho una foto. Vi que me gustaba mucho y empecé a hacer fotos todos los días. Entonces, no sé por qué lo hago pero cuando llego a casa y he hecho una cosa que me gusta —algo que me suele pasar con mucha frecuencia— me llevo una gran felicidad. Entonces, yo creo que las hago porque me gusta, me divierte… Porque es inmediato. Es una emoción que no hay que explicar. No es como la literatura que tienes que explicar algo si no que la fotografía es «Esto que ves, es». Eso me parece muy interesante y muy bonito.
El humor o, más bien, la ironía parece algo innato a ti. Es algo que quien ve una fotografía tuya o tiene la suerte de conocerte aprecia enseguida. ¿Crees que es necesaria para crear?
Creo que lo que es importante es no tomarse en serio nunca a sí mismo. Creo que es lo que hay que hacer con todo. Es cierto que no me importa tomarme más en serio lo que hacen los demás. Me gusta la literatura seria por decirlo de alguna manera. Pero el humor te permite utilizarlo para desviar misiles, es decir, que también tiene esa parte que «yo con humor puedo hacer lo que me dé la gana». Con humor, puedes tomarte todo de una manera totalmente diferente.
El tema del número 3 es “el juego”. El juego ha de ser divertido? ¿Qué tiene que ocurrir para que comience el juego?
Me alegro de que me lo preguntes. Hay un libro que se llama Homo ludens que va de un filósofo húngaro, que habla del tiempo medieval, de que cuando iba a haber una guerra se marcaba en un bosque donde iba a haber una contienda. Se marcaba como un pedazo pequeño igual que cuando ahora hay un accidente y te lo marcan en amarillo. (Esto lo estoy diciendo ahora porque me acabo de acordar pero no tiene nada que ver). El libro iba sobre el juego y lo que te vienen a decir es que en cuanto hay unas reglas, hay un juego. Pero en cuanto hay unas reglas, no todo evidentemente lo que nos vamos a encontrar es un juego. Porque hay reglas que son muy jodidas y hay gente que las utiliza como un juego. Para eso están, por ejemplo, los abogados. Y eso de juego no tiene nada.
La fotografía de portada, ¿qué quieres decir con ella?
La fotografía en principio iba a ser Iván —que es el fotografiado, el modelo—con 40 pelotas por encima de él porque lo que quería decir es que no importa que se vaya de madre porque si estás jugando, para ti es juego. Da igual que se caigan, no importa.
Tu faceta más popular es la de escritora. ¿Son los escritores divertidos o solo sobre el papel?
Yo he conocido escritores y pongo una “s” porque he conocido a dos con los que me río. [risas] Quizá lo que me pasa con la gran mayoría. Tampoco sería justa porque conozco muy pocos. No tendría sentido generalizar pero es verdad que con fotógrafos, por ejemplo, [ya ves cómo me estoy saliendo de la pregunta] hay una sensación de menos gravedad que con el mundo editorial. Esa es la respuesta.
Fotógrafa
Esther García LlovetMini-Biografía
Es escritora, ha publicado en casi todas las editoriales nacionales llevándolas posteriormente a la ruina. También es fotógrafa, hace reportajes de temas que no proceden y entrevistas a personajes siempre turbios, escribe algo de teatro de vez en cuando y su propósito para los próximos lustros es montar un show de humor que le dé mucho dinero y viajar por la Panamericana haciendo reír a la gente como Mark Twain.Website
http://www.elseisyelcuatro.com/«Me gusta que haya un diálogo entre lo que está escrito y lo que se ve»
Buscando referencias tuyas para hacerte esta entrevista, encontré que te consideras muy admiradora de Bolaño, de su “búsqueda” en la escritura. ¿Y tú? ¿Has encontrado algo interesante?
Si he encontrado algo, no me he dado cuenta. Si es cierto que si uno escribe un libro y luego escribe otro después es que evidentemente no ha encontrado lo que estaba buscando. Yo creo precisamente cuando empiezas a escribir algo es con la intención no de encontrar algo si no de generar otra pregunta diferente. No sé si ti empecé a escribir buscando algo o si he encontrado algo pero el simple hecho de escribir —no te digo la literatura porque es una palabra muy grande— ya te conforma algo que te resuelve. Te resuelve aunque no te de nada.
¿Por qué apoyaste —MUCHAS GRACIAS— desde el principio a La gran belleza?
Primero porque sois amigos. ¡Y yo por los amigos sangro! Y porque visualmente las revistas literarias aunque puede que la edición esté bien en España no cuidamos nuestras portadas —salvo alguna excepción—. Y el aspecto que tienen las cosas es importante. Y que sea una revista literaria en la que además haya diseño interesante detrás y que visualmente te entre por los ojos y que sea bonita de ver no es pecado, ¡coño! Las cosas tienen que ser bonitas de ver. Tienen que gustarnos. Todo nos entra por los ojos. Es así. Es la vida. La publicidad importa. Eso es lo que me gusta. Y visualmente me gustan mucho cómo quedan todos los números. Esta portada —y no porque sea mía— las otras me parecen maravillosas. Y me gusta que haya un diálogo entre lo que está escrito y lo que se ve.